La humanidad fue creada por Dios para querer aceptación, felicidad, amor y significado. El corazón del individuo siempre busca algo nuevo, ya sea la comida, viajes, pasatiempos e incluso relaciones y matrimonio. No hay nada de malo en disfrutar estas cosas, porque son cosas buenas que Dios ha creado. Pero sí hay que tener mucho cuidado de no dejar que estas cosas reemplacen y ocupen el lugar que solo Dios puede ocupar. Esta advertencia apunta específicamente contra la soledad que muchos solteros sienten. Esto es porque cuando el soltero hace que su deseo de casarse se vuelva el objetivo principal de su vida, el romance se vuelve en la historia principal de su vida. Pero el romance no es la historia principal de la Biblia y, por lo tanto, no debería ser la tuya. 

 

Pablo dice que Dios requiere algo muy importante de los solteros. Él dice que Dios quiere asegurar una constante devoción de los solteros (1 Corintios 7:35). La palabra “devoción” tiene dos significados en el griego: estar constantemente atento y constantemente en servicio. En otras palabras, significa estar atento a la Palabra de Dios y buscar activamente servir a Dios. Se trata de escuchar, y luego, poner esas cosas en acción para la gloria de Dios. Pablo apunta este mandato para los solteros porque dice que esto es difícil cuando alguien está en una relación o en el matrimonio. Él dice que “el casado se preocupa por las cosas del mundo (1 Corintios 7:33)”, y que “sus intereses están divididos (1 Corintios 7:34)”. Obviamente, esto no implica que los casados no puedan glorificar a Dios de maneras extraordinarias (1 Corintios 7:36-38; Efesios 5:22-33). Pero es interesante cómo esta definición de la devoción se menciona en el contexto de la soltería. En otras palabras, los solteros tienen algo que los casados no tienen. Tienen la libertad de estar atentos a Dios y de servirle, sin distracciones. 

 

Por consiguiente, no fuiste llamado a usar tu libertad para pecar (Gálatas 5:13). La libertad que tienes en tu soltería no fue dada por Dios para que busques a la persona perfectamente compatible. La libertad en tu etapa de la soltería no fue diseñada por Dios para que busques la satisfacción sexual sin ninguna intención al matrimonio. La libertad en tu soltería no fue destinada por Dios para que busques una pareja que te complete. La libertad en tu soltería no fue diseñada por Dios para que busques el epítome de la felicidad en tu pareja. La soltería fue diseñada por Dios para que tengas la libertad de encontrar tu plenitud en Dios, al estar constantemente atento y en servicio a Él. 

 

El ejemplo primordial de esta declaración se encuentra en la vida de Jesucristo. La Biblia nos muestra cómo Cristo estaba tan satisfecho en Su Padre que logró poder hacer todo lo que hizo como soltero. Si Jesús pudo lograr todo lo que Él logró como soltero, ¿podría ser cierto que hoy, de la misma manera, Dios quiere usar tu soltería para que puedas mostrarle al mundo que tu matrimonio con Cristo es suficiente? La búsqueda de tu felicidad en medio de la etapa de tu soltería llegará a su fin cuando puedas ver que tienes toda la libertad de estar devoto al Señor sin distracciones.