top of page
imagen.jpg

ACOSADO

Si tienes a Dios como tu “Acosador”, el diablo y sus demonios se mantendrán alejados.

5 Me preparas un banquete 

En la presencia de mis enemigos. 

Me honras ungiendo mi cabeza con aceite. 

Mi copa se desborda de bendiciones. 

6 Ciertamente tu bondad y tu amor inagotable me seguirán  

todos los días de mi vida,  

y en la casa del Señor viviré  

por siempre. — Salmo 23:5-6 (NTV)  

Profile-SamuelSeo4.jpg

Samuel E. Seo, Th. M.  |  23 de noviembre 2020

En Gran Bretaña, una trabajadora social llamada Shauna Bailey fue acosada por un hombre llamado Richard Jan por seis años luego de que este asistiera a una consulta para la evaluación de su salud mental. Durante este tiempo, Shauna recibió llamadas silenciosas de manera constante, fue asaltada con un ladrillo recibiendo varios golpes en su cara y casi pierde su carro cuando fue incendiado. El acoso llegó a ser tan grave que tuvo que abandonar su trabajo, huir de su casa y obtener una nueva identidad. Richard Jan acosó a otras 200 víctimas hasta que finalmente fue arrestado y juzgado por sus crímenes en 2003.

 

Cada uno de nosotros tiene un acosador 

Ser acosado es horrible, pero ¿sabías que cada uno de nosotros tiene a un acosador acosándonos en este momento? 1 Pedro 5:8 dice: “¡Estén alerta! Cuídense de su gran enemigo, el diablo, porque anda al acecho como un león rugiente, buscando a quién devorar” (NTV). El diablo y sus demonios están constantemente acosándonos. No solo eso, estos acosadores diabólicos son inimaginablemente más malvados, crueles, perversos, despreciables y abominables que cualquier acosador humano. Estos acosadores nos acosan con un profundo deseo de torturarnos y arruinarnos espiritual, emocional, mental e incluso físicamente. A veces su presencia es tan fuerte que, literalmente, se puede sentir. Quizás ya sabes exactamente de qué estoy hablando. Sabes exactamente cómo se siente ser acosado por espíritus malignos.  

La triste realidad es que, sin Dios, cada uno de nosotros merece ser acosado y perseguido de esta manera por el diablo. ¿Por qué? Porque somos pecadores. Todos los pecadores están en las manos del diablo. 1 Juan 5:19 dice: “Sabemos que somos de Dios, y que todo el mundo yace bajo el poder del maligno” (LBLA). Pero gracias a Dios tenemos una manera de prevenir que el diablo y sus demonios se acerquen o nos molesten constantemente.  

Acosado por la bondad y el fiel amor 

En el Salmo 23:6, David dice: “Ciertamente tu bondad y tu amor inagotable me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa del Señor viviré por siempre” (NTV). Lo que es interesante en este versículo es que David usa el verbo “seguirán” para hablar sobre la bondad y el amor inagotable. En el idioma original (hebreo), esta palabra normalmente se usa para acciones hostiles, como ser perseguido por los enemigos en guerra, ser acechado o perseguir para afligir. Pero curiosamente David usa este verbo en conexión con la bondad y el amor inagotable de Dios. Lo que es aún más interesante es que, en Éxodo 33:12-23, cuando Dios le permitió a Moisés el increíble privilegio de ver Su espalda, Dios se refirió a Su presencia como “mi bondad” (v. 19; misma raíz). Entonces, básicamente, David dice que ya no era acosado por sus enemigos (v. 5a), porque Dios personalmente lo estaba acosando con Su presencia de bondad y amor (v. 6) gracias a su relación personal con Él (v. 5b).

 

Dios nuestro “Acosador” 

Si te estás sintiendo acosado fuertemente por el diablo y sus demonios, tienes que conocer las siguientes dos cosas. Primero, he visto cristianos que buscan constantemente la liberación espiritual, pero no reconocen que deshacerse de la presencia demoníaca a través de la liberación es un alivio temporal. El alivio eterno del acoso del diablo es tu relación profundamente personal con Dios a través del arrepentimiento de tus pecados con la sangre de Jesucristo. Solo así el Espíritu de Dios morará en tu corazón por siempre. Sin el Espíritu de Dios morando en tu corazón, sucederá lo que Jesús dice en Mateo 12:43-45a: “Cuando un espíritu maligno sale de una persona, va al desierto en busca de descanso, pero no lo encuentra. Entonces dice: ‘Volveré a la persona de la cual salí’. De modo que regresa y encuentra su antigua casa vacía, barrida y en orden. Entonces el espíritu busca a otros siete espíritus más malignos que él, y todos entran en la persona y viven allí. Y entonces esa persona queda peor que antes” (NTV).  

Segundo, también he notado que hay algunos que dicen que son cristianos, pero no saben cuán presa son. Son tan insensibles espiritualmente que no tienen ni idea o no sienten el demonio que está babeando detrás de sus espaldas. Si no tienes ningún sentido de la presencia de los espíritus diabólicos, no sabrás el nivel de tu peligro, aun cuando un acosador diabólico esté viviendo en tu hogar. Debes pedir a Dios que te abra tus sentidos espirituales para que puedas ser sensible al peligro que está acechando para arruinarte. 

Si tienes a Dios como tu “Acosador”, el diablo y sus demonios se mantendrán alejados, porque Su bondad y amor inagotable te perseguirán por siempre. Amén.

Copyright © 2020 por Samuel E. Seo. 

bottom of page